domingo, 28 de julio de 2013
martes, 2 de julio de 2013
Bye bye
Hoy ha sido el día en el que después de más de tres años y medio desapareces.
Cincuenta pequeñas hojas que eran como cuchillos, que traían el amargo recuerdo del pasado.
Hojas en las que convivían sentimientos positivos y negativos, improvisaciones de ánimo y desánimo, frases textuales simplemente espeluznantes y brutalmente esclarecedoras, diversas estrategias de batalla, entremezcladas con textos con la tinta corrida por mis propias lágrimas.
Hoy ha sido el día en el que decidí que esa batalla había finalizado, por supuesto, con victoria.
Antepuse lo aprendido, caminado y vencido, a las certezas de lo inevitable, al dolor de la verdad de aquellos tiempos.Verdades que ahora son sólo sombras de sí mismas.
Decidí romper esas cincuenta pequeñas hojas. Todas salvo un pequeño extracto de una de ellas. Un puñal de frase textual que me seguía haciendo estremecer cada vez que volvía a leerla. Posiblemente la frase más dura que he oído en mis veintiséis años de vida, representando todos mis miedos y temores.
Ese pequeño extracto no fue a la papelera con el resto, ese merecía un final distinto.
Esa frase se ha convertido hoy en ceniza; ceniza que mis propias manos ha aplastado representando la victoria del presente frente al pasado, la victoria del perdón frente al rencor, la victoria de Dios frente a la oscuridad.
Te llevaré en forma de cicatriz hasta mi muerte, para recordar que tenerte miedo, ya no será ni tan siquiera una opción, no será ni tan siquiera una realidad.
Ceniza, ya sólo eres ceniza. Hasta nunca.
La vida, se abre camino.
Cincuenta pequeñas hojas que eran como cuchillos, que traían el amargo recuerdo del pasado.
Hojas en las que convivían sentimientos positivos y negativos, improvisaciones de ánimo y desánimo, frases textuales simplemente espeluznantes y brutalmente esclarecedoras, diversas estrategias de batalla, entremezcladas con textos con la tinta corrida por mis propias lágrimas.
Hoy ha sido el día en el que decidí que esa batalla había finalizado, por supuesto, con victoria.
Antepuse lo aprendido, caminado y vencido, a las certezas de lo inevitable, al dolor de la verdad de aquellos tiempos.Verdades que ahora son sólo sombras de sí mismas.
Decidí romper esas cincuenta pequeñas hojas. Todas salvo un pequeño extracto de una de ellas. Un puñal de frase textual que me seguía haciendo estremecer cada vez que volvía a leerla. Posiblemente la frase más dura que he oído en mis veintiséis años de vida, representando todos mis miedos y temores.
Ese pequeño extracto no fue a la papelera con el resto, ese merecía un final distinto.
Esa frase se ha convertido hoy en ceniza; ceniza que mis propias manos ha aplastado representando la victoria del presente frente al pasado, la victoria del perdón frente al rencor, la victoria de Dios frente a la oscuridad.
Te llevaré en forma de cicatriz hasta mi muerte, para recordar que tenerte miedo, ya no será ni tan siquiera una opción, no será ni tan siquiera una realidad.
Ceniza, ya sólo eres ceniza. Hasta nunca.
La vida, se abre camino.
domingo, 30 de junio de 2013
sábado, 2 de febrero de 2013
¿Corrupción política? ¿O... general?
¿Alguien se extraña de las acciones de los gobernantes? No debería.
Primero porque no es la primera vez que lo hacen.
Segundo porque las leyes para taparse, encubrirse e indultarse las hicieron entre ellos.
Tercero porque no hacen otra cosa que mentir.
Y para mi el último y principal ninguno de nosotros lo quiere reconocer. Los gobernantes son iguales que su pueblo, son su representación (hablando metafóricamente).
-No me vengáis ahora diciendo que no conocéis o habéis conocido al que roba cosas en el trabajo.
-Al que robaba cosas en clase; al que os ha intentado en el pasado influenciar para mal con términos como "tío, no pagues en el metro, o roba eso tío, no seas tonto, no seas pringao".
-Al que falsea documentos o se empadrona donde no es verdad que vive para que le den todas las becas posibles.
-Al que no declara a hacienda la mitad de las cosas o le pone el nombre de otro.
-Al que no paga los transportes públicos o se lleva el abono de su padre o su abuelo para picar y no pagar él.
-Al que quiere todo hecho sin el menor esfuerzo y le atrae la idea de ganar dinero fácil sin mover un dedo y además su moral se lo permite sin ningún problema.
-Al que le gusta el modelo de vida Gandía Shore o Belén Esteban, sin dar palo al agua pero llevándoselo calentito
...
y un largo etcétera que, si fuera a mayores escalas serían mayores delitos
Mientras nos empeñemos en echar la culpa arriba (aunque es cierto que la tienen en más de un 50%) en vez de reconocer que NOSOTROS no damos tampoco ejemplo y deberíamos darlo, no avanzaremos nada. ¿Vamos a depender del de arriba para ser de una forma o de otra?
Para los que puedan pensar que la gente comete esos actos a consecuencia de que los políticos se aprovechan (el típico "y tú más") y yo tengo necesidades que ellos no, mi opinión es que no, porque hasta los ricos roban aquí. De hecho son los que lo hacen en mayor medida.
Para el que piense que los políticos tienen un nivel de responsabilidad y de ejemplarizar mucho más alto que el resto de ciudadanos estoy de acuerdo, pero si nos preocupáramos en ser mejores personas, a la larga el tema político cambiaría (aunque sólo fuera por relevo generacional).
Y para el que me diga que no es el mismo colarse en el metro que robar dinero y llevárselo a Suiza le diré que evidentemente no es lo mismo, pero los que empiezan sin pagar el metro pueden continuar robando a gente y por qué no, acabar de Presidente del Gobierno de España. Seguro que no sería la primera vez.
jueves, 31 de enero de 2013
La barca
Las relaciones son difíciles, pero son más difíciles aún si cada uno mira hacia un lado.
Al fin y al cabo una relación son dos personas en una barca.
La forma de llevar esa barca determinará la validez y el futuro de esa relación.
Si las dos personas reman en la misma dirección, la barca avanza, la relación por tanto también.
Si nadie rema, la relación se mantiene donde está, no avanza, no evoluciona, muere lentamente.
Si cada persona rema hacia un lado, la barca no dejará de dar vueltas, mareando a los ocupantes… y sin futuro posible.
Cuan importante es en una relación… mirar y remar en la misma dirección.
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