martes, 11 de septiembre de 2012

David Jiménez

"Quizá ha llegado la hora de aceptar que nuestra crisis es más que
económica, va más allá de estos o aquellos políticos, de la codicia de
los banqueros o la prima de riesgo. Asumir que nuestros problemas no
se terminarán cambiando a un partido por otro, con otra batería de
medidas urgentes o una huelga general. Reconocer que el principal
problema de España no es Grecia, el euro o la señora Merkel. Admitir,
para tratar de corregirlo, que nos hemos convertido en un país
mediocre.

Ningún país alcanza semejante condición de la noche a la mañana.

Tampoco en tres o cuatro años. Es el resultado de una cadena que
comienza en la escuela y termina en la clase dirigente. Hemos creado
una cultura en la que los mediocres son los alumnos más populares en
el colegio, los primeros en ser ascendidos en la oficina, los que más
se hacen escuchar en los medios de comunicación y a los únicos que
votamos en las elecciones, sin importar lo que hagan. Porque son de
los nuestros.

Mediocre es un país que se preocupa más por el futbol que por la

política. Hemos visto las calles llenas de televisiones y, montones de
personas absortos viendo como unos millonarios dan una patada algo que
no nos traerá progreso alguno, y gritamos ante un gol, como cortos
adolescentes. Antes los hombres hoy también la mujeres, claro esto es
integración ¿integración, igualdad.......-?

Dijo Gandi: si los hombres prestasen tanta atención a la política como

al futbol, otros gallos nos cantarían.

Somos mediocres.


Somos mediocres porque hay un principio que dice la unión hace la

fuerza, y en España cada individuo está añorando un Estado para él
solito. Porque cada Español se siente más listo, más inteligente, más
culto, mas trabajador, más rico, menos pobre, con mas ideas que su
vecino. Y esto es un error de dimensiones enormes. Pero ¿por qué?.
Porque tenemos unos políticos periféricos que no ven más allá de sus
narices, -bueno de sus sillones-. Claro está disponen para ello de un
pueblo fácil de meter al redil, por inculto políticamente a más no
poder. Cuidado cuando estás leyendo esto. Cuidado contigo. Veamos: la
izquierda no se sale de sus ideas por las historias que le han mal
contado, las derechas porque creen demasiado en raíces y en ningún
caso las fronteras son tan claras. En definitiva necesitamos políticos
que formen al pueblo con amplitud de miras y no con visión de sillón.

¡¡¡¡ Que fácil nos manipulan !!!!!


Los políticos de izquierdas cuantos más descamisados tengan más

posibilidades de votos tienen, desgraciadamente es así. Los de
derechas......

Estamos tan acostumbrados a nuestra mediocridad que hemos terminado

por aceptarla como el estado natural de las cosas. Sus excepciones,
casi siempre reducidas al deporte, nos sirven para negar la evidencia.

- Mediocre es un país donde sus habitantes pasan una media de 134

minutos al día frente a un televisor que muestra principalmente
basura.

- Mediocre es un país que en toda la democracia no ha dado un

presidente que hablara inglés o tuviera unos mínimos conocimientos
sobre política internacional.

- Mediocre es el único país del mundo que, en su sectarismo rancio, ha

conseguido dividir incluso a las asociaciones de víctimas del
terrorismo.

- Mediocre es un país que ha reformado su sistema educativo tres veces

en tres décadas hasta situar a sus estudiantes a la cola del mundo
desarrollado.

- Mediocre es un país que no tiene una sola universidad entre las 150

mejores del mundo y fuerza a sus mejores investigadores a exiliarse
para sobrevivir.

- Mediocre es un país con una cuarta parte de su población en paro,

que sin embargo, encuentra más motivos para indignarse cuando los
guiñoles de un país vecino bromean sobre sus deportistas.

Es mediocre un país donde la brillantez del otro provoca recelo, la

creatividad es marginada -cuando no robada impunemente- y la
independencia sancionada.

Un país que ha hecho de la mediocridad la gran aspiración nacional,

perseguida sin complejos por esos miles de jóvenes que buscan ocupar
la próxima plaza en el concurso Gran Hermano, por políticos que
insultan sin aportar una idea, por jefes que se rodean de mediocres
para disimular su propia mediocridad, y por estudiantes que
ridiculizan al compañero que se esfuerza.

Mediocre es un país que ha permitido, fomentado y celebrado el triunfo

de los mediocres, arrinconando la excelencia hasta dejarle dos
opciones: marcharse o dejarse engullir por la imparable marea gris de
la mediocridad."

David Jiménez.

http://davidjimenezblog.com/2012/02/28/el-triunfo-de-los-mediocres/